Domingo de Ramos de estreno
La Semana Santa ha comenzado y las nueve cofradías que procesionan el Domingo de Ramos pudieron completar todos sus desfiles procesionales y estrenaron el nuevo Recorrido Oficial.
Málaga amanece con el sonido de los pájaros y un cielo azul Domingo de Ramos. El corazón te da un vuelco cuando levantas la persiana y compruebas en el calendario que sí, que por fin ha llegado este día, que por fin comienza la Semana Santa.
Justo a las 10:15 horas de la mañana se abrieron las puertas de la Casa Hermandad de la Cofradía de la Pollinica en calle Parras. Emoción desmedida cuando Nuestro Padre Jesús a su Entrada en Jerusalén salía muy poquito a poco a los sones de “Entrando en Jerusalén” interpretada de forma excepcional por la Agrupación Musical Dulce Nombre de Jesús de Granada. Un año más los pequeños hebreos revoloteaban sus largas palmas y anunciaban la llegada del Señor triunfante de Pollinica. Y tras él, inmediatamente después salió María Santísima del Amparo, bellísima con esa mantilla blanca que caía de forma sutil y elegante sobre su manto. Con “La Virgen de Sevilla” se mecía la Virgen del Amparo frente a la Parroquia de San Felipe Neri mientras sonaban las campanillas de su hermoso trono.
El esfuerzo que ayer realizó la Hermandad de Humildad y Paciencia es sencillamente admirable. Tras toda la mañana acercándose desde su barrio de la Cruz del Humilladero al centro de la ciudad se plantaron en calle Nueva tras la Virgen del Amparo. Ambos tronos acompasaron marchas en toda la calle y se hacía patente el aliento y el apoyo de todos los vecinos del barrio, juventud cofrade en estado puro. Espectacular el tocado que lucía María Santísima de los Dolores y Esperanza con el corazón traspasado por los puñales.
Bien entrada la tarde llegaba el cortejo de la Mayordomía de Lágrimas y Favores a calle Echegaray. Con sones alegres y ese movimiento característico del trono se adentraba en la calle la Niña de San Juan. Paso hacia adelante, mecida, paso hacia atrás, nueva mecida, arranca la marcha y con ella, los aplausos de todos los allí presentes. Guapa a rabiar, porque ese joyero perfecto que tiene por trono la Señora ayer lucía espléndido.
La Hermandad del Dulce Nombre discurrió tras la Virgen de Lágrimas y Favores por el Teatro Echegaray. Magnífico discurrir y orden del cortejo por este punto del centro histórico, con unas filas nazarenas bien compactadas y tronos muy bien portados. A los sones de “Reo de Muerte” levantaba muy lentamente el trono de Nuestro Padre Jesús de la Soledad, lo que desencadenó una de las grandes ovaciones de la jornada. María Santísima del Dulce Nombre con ese palio de malla provocó que todos los balcones estuvieran repletos a su paso para ver su bello rostro desde una perspectiva diferente.
Llega la Hermandad de la Salud, y con ella, la máxima expresión de la Semana Santa en todos los sentidos. Una nube de incienso casi no permitía vislumbrar al Santísimo Cristo de la Esperanza en su Gran Amor, y con unas marchas de ensueño se plantó en el tramo final de Echegaray. Dos toques de campana, uno final y se levanta perfectamente con los cuerpos derechos, y de repente sucede, esa magia que tiene el Domingo de Ramos. La Agrupación Musical Vera+Cruz de Campillos estuvo sublime, y el trono giraba muy lentamente hacia calle Granada. Tras él, la hermosa Virgen de la Salud llenaba la calle con su presencia en el atardecer de la jornada. La Cofradía comenzaba su recorrido de vuelta al barrio de la Trinidad con una mayor entereza que en años anteriores, fruto del trabajo, esfuerzo y compromiso de todos los hermanos que forman parte del cortejo.
La Cofradía de la Humildad es ya un ejemplo consolidado de seriedad y buen hacer en la calle, desde el primer minuto hasta que el cortejo se encierra de nuevo en la Basílica de la Victoria. Elegante transitar de ambos tronos por esta calle Echegaray. El Santísimo Cristo de la Humildad en su Presentación al Pueblo giró hacia calle Granada e inmediatamente después a Méndez Núñez de forma magistral, aunque a su paso una ambulancia tuvo que cortar la formación de la Banda de Cornetas y Tambores del Paso y la Esperanza sin mayor incidencia. La Señora de la Merced consiguió enmudecer al público mientras contemplaban la bella escena de San Juan Evangelista con la mano apoyada sobre la espalda de la Santísima Madre.
En Semana Santa se desafían las leyes de la física, ayer sucedió con la Hermandad de Salutación en el tramo final de la calle San Agustín. Un cordón policial prohibía el paso de público aunque al llegar la Cruz Guía se apostaron numerosas personas en esa esquina en la que confluyen las calles San Agustín y Granada. Llegó Jesús Nazareno de la Salutación y comenzó a embocar la Plazuela de Jesús Castellanos, sensacional el misterio y el paso corto de sus portadores en esa complicada maniobra. Y si ya hablamos de la calidad de la Agrupación Musical del Rescate de Linares, directamente nos quedamos sin calificativos, un placer tener a esta formación en Málaga. La Virgen del Patrocinio llegaba más afectada por el cansancio que el primer trono de la Cofradía, aún así discurrió muy sobria y elegante en su bajada por calle Granada.
La Cofradía del Prendimiento llegaba a una calle Casapalma con poca presencia de público pasadas las 23 horas de la noche. En apenas unos minutos se plantó el trono de Nuestro Padre Jesús del Prendimiento en la Plaza Uncibay dispuesto a afrontar la subida de Casapalma, precedido de un cortejo de nazarenos pobre, en el que llamaba la atención la gran cantidad de hermanos vestidos con túnica sin capirote que pasaban tras el público allí congregado y por las calles aledañas. El Señor del Prendimiento, ataviado con su soberbia túnica bordada y mantolín color crema, subió con “Tu Misericordia”, y se detuvo para subir calle Cárcer a tambor. El cansancio en los portadores era más que notable. María Santísima del Gran Perdón reinaba en su gran barco con un colorido exorno floral, sin embargo, la Banda de Música Nuestra Señora de la Soledad de la Congregación de Mena tuvo que cortar la marcha “Gran Perdón” y el trono subió también a tambor calle Cárcer.
Ya llegaba la Archicofradía del Huerto al Puente de la Esperanza, por el entorno del mercado de Atarazanas. Un buen cortejo precedía a Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, que llegó con “Resucitó” interpretada de forma imponente por la Agrupación Musical Cautivo de Estepona. De nuevo, el cansancio se hacía notar en los varales, aún más palpable en el trono de la Dolorosa de la Concepción. La Virgen lució sencillamente espectacular con esa imponente corona que realzaba toda su belleza. Poco público por ese entorno acusado por la larga jornada que comienza a primera hora de la mañana. Ayer la Archicofradía presentó uno de los mejores exornos florales que se recuerda, y el trono del Señor lució impresionante tras su restauración. La unión de todos los portadores sobrecogió a las personas que presenciaban el paso de la procesión y aplaudían premiando el enorme esfuerzo realizado.
Un día muy largo en el que se produjeron pequeños incidentes en las tribunas del Recorrido Oficial, con poco público a primera hora de la tarde en las sillas y por la noche en las calles. Las altas temperaturas fueron el detonante principal del cansancio en los cortejos nazarenos y en los portadores. También es destacable el percance que sufrió Nuestro Padre Jesús del Prendimiento a su paso por Carretería a la altura de Postigo de Arance con la caída de su mano derecha que fue rápidamente solucionado.
Un nuevo Domingo de Ramos que se nos marcha y que habrá que analizar pasado algo más de tiempo. Lo que está claro es que una jornada que comienza tan temprano no puede acabar tan tarde porque algunas cofradías vuelven desangeladas por algunos puntos de su recorrido. Toca descansar y disfrutar del Lunes Santo y sus seis cofradías que ofrecerán lo mejor que tienen a su ciudad.