Décima Estación (2020), por José Manuel Martos Lendínez
Buenas a todos los lectores y seguidores de Palio de Plata. Me gustaría empezar agradeciendo a Francisco Gil por su interés sobre “Décima estación” y, por supuesto, también me gustaría acordarme de la Agrupación Musical San Lorenzo Mártir y, en especial, de su director musical, Salvador Quero Morales, por brindarme la oportunidad de hacer realidad este proyecto. Por último, y sin olvidarme de él, a Christian Palomino por la paciencia y dedicación que ha tenido siempre conmigo y con mi música.
“Decima estación” comienza a fraguarse a finales de diciembre de 2018 donde empecé a escribir los primeros compases. Hablando con Salvador Quero, me comentó varios datos peculiares de la Semana Santa de Málaga, entre otras que acompañaban a una imagen de Palma Burgos. Fue un dato que me llamó muchísimo la atención puesto que en Sabiote (mi localidad), Úbeda, o incluso Jaén (donde resido), hay muchísima imaginería de él. A partir de ahí, surge la idea de dedicar la marcha al Señor del Santo Suplicio. Termino la marcha a mediados de enero de 2019, por lo que no da tiempo a que esta forme parte del repertorio ese año y se incorporaría en el de este año.
“Décima estación” comienza en Fam con un dúo de trompeta muy romántico que da paso a un solo de corneta que va creciendo hasta la incorporación en forte de toda la banda. Continúa con unos arpegios de los metales sobre una cadencia andaluza para volver a dar paso a una trompeta solista que, esta vez, es mucho más agresiva hasta modular a Sibm. A partir de ahí, la música pasa a ser muy dulce, adquiriendo el bombardino un papel, aún más, fundamental en el contrapunto. Es una parte muy expresiva en la que la interpretación de ese piano es fundamental para entender la marcha como la había concebido.
Continúa la marcha con el piano, pero con una melodía que se va transformando hasta llegar de nuevo a un forte en el que las cornetas le dan el brillo al conjunto. Vuelve a un piano, que sin ser súbito, si que tiene un contraste con la anterior parte, de igual modo, vuelve a ser una melodía dulce, expresiva, que rompe con lo anterior. Es una parte muy delicada, debido a que vuelve a Fam y comienza a coger fuerza de nuevo con tres trompetas que llevan la melodía hasta otro punto de la marcha. Aquí vuelve a entrar la cornetería, dándole de nuevo a la marcha un golpe de efecto para no perder la atención del oyente. Como final, la percusión da paso a los metales para volver a recordar el principio, incluyendo ahora a las cornetas y añadiendo una nueva sonoridad al incluir en la armonía un cuarto del menor prestado del modo mayor con sexta terminando así la marcha con mucha fuerza.
A modo personal, al no conocer bien de primera mano el recorrido del Señor del Santo Suplicio, me he basado en el recorrido de otro Despojado que conozco bastante bien, el del titular de mi banda. He descrito lo que vivimos y cómo lo vivimos mis compañeros y yo, y como creo que lo pueden vivir también los compañeros de la Agrupación Musical de Viñeros.
Como anécdota, es la primera marcha que componía para el género de Agrupación Musical, aunque no ha sido la única este año. Mis grandes amigos de la Agrupación Musical Virgen de la Esperanza de Alcalá la Real (Jaén) estrenaban un pasacalles titulado “Ahí viene la Esperanza” en la ciudad de Córdoba el mismo día que San Lorenzo Mártir hacía lo propio en la sala Falla del Conservatorio Superior de Málaga.
Para concluir, me gustaría, de nuevo, agradecerle a la Agrupación el magnífico trato que tuvieron conmigo el fin de semana que estuve en Málaga. Tuvimos un ensayo muy productivo en el que pude comprobar de primera mano el nivel tan altísimo que tiene la banda. También destacar que volví a Jaén muy contento con el resultado final de la marcha, en la que apenas tuve que matizar alguna parte debido al gran equipo de dirección que tienen. Alabar el trabajo que están llevando a cabo en la Agrupación, es un orgullo para mí que mi música suene y de qué manera en una de las Semanas Santas más señeras y referentes del país.
Y sin olvidarme de él, muchísimas gracias a Salvador Quero, Director Musical de la banda y grandísimo amigo mío por apostar por mi música para su banda y abrirme de par en par las puertas de su casa. Se lo agradezco de corazón porque poca gente me he encontrado en este mundillo cofrade como él.
José Manuel Martos Lendínez
Nacido en Sabiote, una localidad con mucho encanto de la provincia de Jaén. Ha cursado el Grado de Educación Primaria en la Universidad de Jaén y, actualmente, estoy estudiando el Grado Medio de Técnico en Emergencias Sanitarias. Musicalmente hablando, formó parte de la CCTT Stmo. Cristo de la Expiración de Sabiote que fue donde aprendí y crecí como músico, he colaborado con distintas bandas de la provincia de Jaén hasta recaer en la Agrupación Musical Ntro. Padre Jesús Despojado de la capital. También destacar que desde el pasado septiembre dirijo a la CCTT INRI de Torreperogil (Jaén).