25 Años del Gran Via Crucis Jubilar
El 25 de marzo de 2000, Málaga vivió un histórico Via Crucis Magno, celebrado por el Gran Jubileo en conmemoración del nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo, Redentor del Mundo.
Conmemoración del Via Crucis Público en Málaga: Un Evento Histórico para la Semana Santa
La Agrupación de Cofradías decidió conmemorar una efeméride de gran trascendencia mediante un acto piadoso de gran magnitud: un Via Crucis Público. Este evento, que contaba con la participación de las hermandades cuyas devociones coincidían con las estaciones del Via Crucis de acuerdo con lo establecido por Juan Pablo II, se celebró en un contexto en el que las procesiones extraordinarias y los desfiles magnos eran eventos poco frecuentes en Málaga. La fecha elegida para la conmemoración fue el 25 de marzo, festividad de la Encarnación del Señor.
La Preparación y Participación de las Cofradías
El 16 de diciembre de 1999 se aprobó la lista de las hermandades participantes, cuyas imágenes cristíferas representaron las 14 estaciones del Via Crucis. Las catorce hermandades siguieron el orden cronológico establecido por el Papa Juan Pablo II, y cada una de ellas, con sus respectivas imágenes, formó parte de esta conmovedora procesión. Las estaciones representadas fueron las siguientes:
- Huerto: Cristo orando en Getsemaní
- Rescate: Traición de Judas y prendimiento
- Humillación: Cristo despreciado por Herodes y devuelto a Pilatos
- Columna: Jesús flagelado y escarnecido
- Ecce-Homo (Humildad): Presentación al Pueblo
- Nazareno del Paso (Esperanza): Jesús carga con la Cruz
- Pasión: Cristo ayudado por el Cirineo
- Salutación: Cristo consuela a las mujeres de Jerusalén
- Perdón: Cristo crucificado entre malhechores
- Penas de Salesianos: Jesús confía a su madre al discípulo amado
- Expiración: Cristo muere en la cruz
- Sangre: Una lanza traspasa su costado
- Descendimiento: Cristo es bajado de la cruz
- Sepulcro: Cristo es depositado en el sepulcro
La Plaza del Obispo, se convirtió en el centro neurálgico de la meditación y oración de las estaciones del Via Crucis.
El Itinerario y los Momentos Históricos
A las 19:30 horas, comenzó el recorrido oficial, que tuvo su inicio en la Plaza del Siglo. Los cortejos avanzaron por Molina Lario hasta llegar a la Catedral, donde las hermandades hicieron una pausa para realizar la meditación de cada estación. Luego, continuaron su trayecto hacia sus respectivas sedes y casas hermandades.
El evento estuvo marcado por una serie de momentos históricos, debido a la premisa de no partir de tinglaos; La salida del Señor de la Oración en el Huerto salió desde la Parroquia de Santo Domingo, antes de que la corporación construyera su actual casa hermandad, fue uno de ellos. También resultó simbólica la salida del Cristo de la Columna desde la Iglesia de los Santos Mártires y el misterio del Crucificado de las Penas desde la Casa Hermandad de la Paloma. A su vez, la Humildad partió de la Casa Hermandad del Rescate, y ambas representaciones coincidieron dejando una estampa histórica en el barrio de la Victoria, dejando una imagen imborrable. El Descendimiento y el Sepulcro salieron de la Catedral, concluyendo su participación en el mismo templo.
La Celebración y la Meditación
A las 20:00 horas, el evento central comenzó con la entrada de la primera cofradía en la Plaza del Obispo, donde se inició la meditación de las estaciones. La presidencia del acto estuvo a cargo del Obispo de la Diócesis en ese entonces, don Antonio Dorado Soto, quien estuvo acompañado de importantes personalidades, como Alfonso Crespo Hidalgo (hoy párroco de San Pedro), el deán Francisco García Mota, el delegado de hermandades Antonio Ruiz Pérez (quien ya ha fallecido) y el director del comité diocesano del Jubileo, Fernando Jiménez.
El hermano mayor de la hermandad del Amor en ese momento, Federico Fernández Basurte, pronunció la monición de entrada, dando paso al inicio del desfile de los tronos, que avanzaron en un profundo silencio. Durante el recorrido, hermanos mayores se encargaron de leer las catorce estaciones, concluyendo el acto cerca de las 22:30 horas. El Obispo cerró la jornada impartiendo la bendición final a los participantes.
El Contexto de los Traslados y la Respuesta Popular
La jornada previa, el 24 de marzo, tuvo lugar el traslado del Cristo del Huerto desde la Iglesia de los Santos Mártires hasta la Iglesia de Santo Domingo. También se trasladaron el Cristo de Pasión, que se encontraba en la Iglesia de San Julián debido a las obras en su templo, y el Cristo de las Penas y la Virgen del Auxilio desde la Casa Hermandad de la Paloma en la plaza de San Francisco. Además, la Humildad trasladó al Señor desde el Santuario hasta la calle Agua. La participación del Crucificado de la Sangre y de María Santísima de Consolación y Lágrimas, que se unió de forma extraordinaria en la configuración del misterio, y que siete año después, con motivo del V centenario fundacional de la hermandad, se volvió a repetir dicha estampa.
Uno de los grandes estrenos de la jornada fue el grupo escultórico del Santísimo Cristo del Perdón de la hermandad de Dolores del Puente, una de las imágenes más impactantes del evento. El Señor, acompañado de los dos ladrones, San Juan y la Virgen de la Encarnación.
La Aceptación Popular
El Via Crucis Público fue un éxito rotundo, y la respuesta de la ciudad no se hizo esperar. La multitud de visitantes que acudieron a contemplar el evento demostró la relevancia del acto, especialmente a tan solo unos días del inicio de la Semana Grande. Fue, sin lugar a dudas, un día lleno de emociones y una experiencia memorable para todos los malagueños, que podrán recordar esta jornada histórica como un hito en la historia de la Semana Santa de Málaga.
