La hermandad del Monte Calvario finaliza la restauración del retablo de la ermita
La corporación del Viernes Santo ha culminado la obra de la mano de la empresa Chapitel, que ha saneado la pieza para que continúe enriqueciendo el patrimonio desde el siglo XVIII
La hermandad del Monte Calvario ha culminado y presentado la completa restauración del retablo barroco de la ermita que acoge a su titular mariana, la cual ha llevado a cabo la empresa Chapitel en los últimos meses. Esta labor de saneamiento ha servido para mantener una de las pocas piezas que aún perviven en Málaga desde el siglo XVIII y que seguirá enriqueciendo artísticamente el patrimonio de la Semana Santa de la ciudad.
Sin embargo, no es la única remodelación que se ha producido. El propio camarín en el que se encuentra Santa María del Monte Calvario se ha dotado de una cúpula de arista y relieves artesanales hechos con yesería, lo que le ha otorgado mayor visibilidad y visibilidad. Además, se ha vuelto al marmoleado interior original de la urna del Santísimo Cristo Yacente de la Paz y la Unidad. Como novedad, esto ha hecho que se reintegre en el retablo y vuelva a la que ha sido su histórica disposición.
También se han integrado volumétricamente los dos estípites, hasta el momento ausentes, y se les ha incorporado la imagen anónima de Dios Padre, cuya ejecución ha sido de Raúl Trillo y Salvador Lamas. También se han renovado las peanas de San Francisco de Paula y San Juan Bautista y se ha sustituido el Vía Crucis que hay en el interior del templo por un conjunto de estaciones.
Como últimas novedades se han modificado la capilla lateral de Nuestra Señora de Fe y Consuelo, que tiene un nuevo camarín, y el altar de la Divina Pastora del Monte Calvario, que tiene un paisaje campestre relacionado con su iconografía original. Así, la corporación del Viernes Santo culmina uno de los mayores proyectos iconográficos de los últimos años.