El esfuerzo, tiene su recompensa
La Confraternidad de culto y procesión de Jesús Nazareno de la Llaga en el hombro y M Stma. de la Buena Fe bendice su nuevo altar el sábado 13 de agosto, en la misa de 19hrs.
Tras incansables años de lucha en busca de una sede donde rendir culto a sus titulares, la Parroquia de la Trinidad dio acogida a la confraternidad, suponiendo una marca histórica para ellos. Ahora, tras instalarse y participar de la vida diaria de la parroquia, el nazareno de la llaga en el hombro presidirá un nuevo altar.
El altar está formado por tres cuerpos. Dos de ellos son laterales y uno central, en el cual queda situado el nazareno. Sobre Él encontramos una pintura alegórica del momento en el que El Señor se presentó a San Bernardo de Claraval para hablarle de la Llaga de su hombro, advocación que recibe el titular de la confraternidad. Más abajo, y en una elaborada crestería dorada en la que aparece la inscripción «EGO SUM VIA, VERITAS ET VITA» nace una bambalina en cuyo centro se encuentra una cartela con nuestra patrona, Santa María de la Victoria.
En los cuerpos laterales encontramos, como remate, dos cartelas en las que aparecen el cristo de la Misericordia «chiquito» y el Stmo. Xto. de la Expiración, imágenes cristiferas del ala del barrio del perchel donde nació esta corporación, hoy trinitaria. Más abajo dos ángeles flanquean al nazareno uno portando las escaleras que nos llevan a la cruz y el otro la lanza de longinos que atravesó el bendito costado de Jesús. A continuación, y siguiendo descendiendo, encontramos dos grandes capillas en las que se encuentran San Andrés apóstol, patrón del barrio del perchel, lugar de nacimiento de la corporación tal como se indicó antes y al otro lado, San Judas Tadeo, patrón de las causas imposibles, dada las vicisitudes sufridas por esta confraternidad para encontrar una sede definitiva.
Para finalizar la zona lateral dos ángeles más, uno portando los clavos y el INRI que nos simbolizan la crucifixión del señor y el otro portando un flagelo y un pañuelo símbolo del dolor de la pasión.
El nazareno se encuentra posicionado entre dos hachones dorados, que terminan de rematar el conjunto.