Derecho al pataleo

El informe presentado por Expiración solo se entiende desde la necesidad de agotar hasta el último «cartucho».

Justo ahora hace dos años que escribí en esta mismo medio que la Agrupación de Cofradías se movía en los meses veraniegos para intentar aprobar el nuevo Recorrido Oficial de cara a la Semana Santa de 2017. Dos años después nos encontramos en el mismo periodo estival y con la misma incertidumbre de si será 2019 el año del nuevo trazado agrupacionista. En aquel artículo planteaba muchas interrogantes, algunas se han ido resolviendo, otras se mantienen y han surgido unas nuevas.

Por aquel entonces sospechaba que «algo olía a podrido en la Agrupación» porque desde el año 2014 en que comenzaron a mover el tema, había más oscurantismo que claridad en los planteamientos, en las reuniones y en las conversaciones. Desde 2016 hasta la actualidad parece que sí han sido más transparentes, al menos de cara a la opinión pública, aunque el dossier presentado esta semana por la Archicofradía de la Expiración, donde no se deja títere con cabeza, parece que confirma aquellas «malas prácticas» del ente agrupacional. En un primer momento aceptan que el actual Recorrido Oficial tiene margen de mejora, para desmontar a continuación una por una todas las justificaciones y necesidades de cambio que planteaba la Agrupación, aunque en muchas de ellas también llegan a contradecirse.

Pero el informe de los de San Pedro llega tarde. La Agrupación lleva cuatro años con esto, y no pueden darse por «no enterado» en todo este tiempo. Reconocen haber tenido reuniones, ¿y en ninguna de ellas han tenido la oportunidad de plantear todas las propuestas que ahora exponen en su dossier? Todo apunta a querer ganar tiempo, a que se vuelva a meter en la batidora de la Agrupación los ingredientes de cada Hermandad. Metamos cuarenta y una propuestas, una por cada Cofradía. ¡Ah! sin olvidar a los comerciantes, restauradores y abonados. Metamos también al señor alcalde, que después no llega con el martillo a tiempo para dar los toques de salida. Y por supuesto, metamos a la Iglesia porque digo yo, que algo tendrá que decir.

Si se lee con detenimiento las doscientas páginas del informe, se vislumbra un malestar enquistado hacia la Agrupación; parece más una «puñalada trapera» como decimos por aquí; porque se pueden encontrar frases como: «[…] ¿De verdad se ha querido solucionar alguna vez el problema por parte de las cofradías dejando a un lado intereses partidarios y anteponiendo el bien común? Nuestra humilde opinión es que no.», o «Una estación de penitencia ha de tener una continuidad, un discurrir, un discurso, un avance en todo momento. Es iniciar un camino hacia un fin, simbología pura, y no, un deambular sin sentido por las calles de nuestra ciudad». Acusaciones como esta pueden leerse prácticamente en cada página, por lo que parece que se han estado guardando todas ellas durante cuatro años para presentarlas juntas sobre la bocina.

Hay cosas en el informe de la Expiración que debieran ser tenidas en cuenta para la mejora del Recorrido Oficial, sea el que sea, y por ello la Agrupación debiera leerlo con aire constructivo, y no entrar en la disputa; pero el Recorrido Oficial que plantean desde la Archicofradía trata de alargar el actual hasta la Plaza del Obispo, resultando idéntico al que realizan cada Miércoles Santo. Por lo que les vendría como anillo al dedo. Es cierto que dan dos opciones más, pero realmente no son viables.

Tengamos claro que las decisiones que afectan a muchos no convencerán a todos. Para eso está la democracia. Difícilmente un nuevo recorrido contentará a todos, se llame Expiración o se llame Mediadora. Veremos que pasa el próximo martes, pero creo que todo el camino recorrido por la Agrupación hasta la fecha no va a ser tirado por la borda. Estaremos atentos.

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