La Archicofradía de la Expiración aprueba la reforma del trono de la Virgen de los Dolores
El orfebre Ramón León Losquiño ejecutará la restauración en un plazo de tiempo hasta 2024 y con un gasto de en torno a 150.000 euros
La Archicofradía de la Expiración ha aprobado en cabildo extraordinario la reforma del trono de María Santísima de los Dolores Coronada, así como el gasto que supone. Con 190 votos a favor, 36 en blanco y 2 en contra, la propuesta ha salido adelante y se ejecutará hasta el año 2024. El coste será de en torno 150.000€ y la llevará a cabo el orfebre Ramón León Losquiño (Sevilla), quien también restauró hace unos meses una corona de la Hermandad de la Esperanza de Triana.
El principal problema son unas manchas de níquel que se han encontrado en el trono de la Virgen de los Dolores, según un estudio del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH). Este elemento químico ha provocado la oxidación y, a largo plazo, el deterioro del metal original. Además, estas manchas oscuras también han impedido la reparación de pequeños desperfectos, pues al aplicar calor se generan pompas de difícil eliminación, por lo que se han encontrado lugares con carencia de plateado.
La aparición de este metal ha ocasionado la urgencia de su retirada. El objetivo es platear el trono en su conjunto para respetar la obra original que desarrolló Seco Velasco. Además, se pretende recuperar elementos perdidos o devolver otros a su estado primitivo. También se han detectado medios de anclaje que se han incorporado a lo largo de los años de forma inapropiada y pretenden volver a los sistemas iniciales.
El trono de la Virgen de los Dolores se realizó entre 1946 y 1950 en los talleres de Manuel Seco Velasco, convirtiéndose así en una de las grandes piezas barrocas de la Semana Santa de Málaga. El orfebre ya había realizado para la hermandad una corona en 1945 para la titular mariana, que fue robada, y el primer juego de potencias del Santísimo Cristo de la Expiración, así como la decoración de la parte inferior de los hachones del trono del cristo.
El trono ha ido sufriendo daños a lo largo de los años con las salidas procesionales, los procesos de montaje y desmontaje, además de la utilización de algún elemento singular de la obra para usarlo en los cultos. Desde la década de los años 80 se han producido cinco restauraciones.
Con esta reforma se afronta la conservación de la obra original de una forma profesional, lo que garantizará su perdurabilidad. Aunque no se descarta que en el futuro sean necesarias otras mejoras periódicas que aseguren el mantenimiento del trono de la Virgen de las Dolores.