La Virgen del Amor Doloroso regresa al culto tras su restauración
La Virgen del Amor Doloroso regresará a su capilla de los Santos Mártires el próximo 26 de agosto tras la intervención de los últimos cuatro meses.
El pasado 12 de mayo la Virgen del Amor Doloroso, titular mariana de la Archicofradía de Pasión, era retirada de su culto habitual para ser sometida a una restauración a cargo del catedrático Juan Manuel Miñarro.
Regreso al culto
La imagen, expuesta en veneración por última vez el 11 de mayo en Besamanos Extraordinario, previo a abandonar su capilla, regresa el próximo 26 de agosto a la que sea sede canónica de esta Archicofradía del Lunes Santo, la Parroquia de los Santos Mártires.
De este modo, María Santísima del Amor Doloroso restablecerá su culto a partir del domingo, en que será expuesta en Besamanos en su capilla desde las 10 horas. A las 12:30 horas tendrá lugar la Santa Misa, culminando con el canto de la Salve.
Así pues, la imagen que no pudo ser expuesta durante los Besamanos celebrados con motivo del 150º y 75º Aniversario de Patronazgo y Coronación Canónica de la Patrona de la ciudad, sí estará dispuesta para sus cultos anuales de Septiembre, por la Festividad de los Dolores Gloriosos.
La restauración
La restauración de la talla ha sido acometida en Sevilla, en los talleres del profesor, imaginero y restaurador D. Juan Manuel Miñarro.
La intervención, que ha comprendido un periodo de cuatro meses, ha consistido en una limpieza de policromía, en la que se han eliminando repintes, adiciones o falsas pátinas; así como en solventar aspectos estructurales de la imagen para actuar sobre los graves problemas de conservación que presentaba hasta el momento.
Para estos trabajos se ha confiado en el profesor Miñarro, quien ya haya realizado diversas actuaciones de restauración en nuestra ciudad, siendo la última y más importante, la de Jesús Cautivo. De cara a los próximos meses trabajará en la conservación del Santo Cristo de la Vera+Cruz y Sangre, de las Reales Cofradías Fusionadas.
La talla
La talla de María Santísima del Amor Doloroso tiene su origen en el s.XVIII, de dulce rostro y suaves líneas, atribuida al escultor Antonio Asensio de la Cerda; siendo una de las pocas imágenes que conserve sus manos entrelazadas originales en la actualidad.
Durante el paso de los años la imagen dieciochesca sufrió una serie de desafortunados repintes de la mano de atrevidos artesanos, hasta el punto de hacer irrecuperable su carnación original. Es por esto que, en 1977 es arduamente restaurada por el gaditano Luis Ortega Bru, quien intervino sobre la maltratada fisonomía y le otorgara algunos matices comunes de su estética temperamental.
Bru esculpió además, un año antes, la actual e imponente talla cristífera de la Archicofradía, Nuestro Padre Jesús de la Pasión.
Fotografía de portada: Luisma Gómez.